Encapsular Amianto | Cómo hacerlo y Porque es importante
El amianto o asbestos es un mineral que se extrae de la tierra que se ha empleado en diversos sectores entre el 1900 y el 2000, principalmente por las características que este ofrecía, así como por su reducido precio de extracción y manipulación.
De hecho, en el proceso de desamiantado, es uno de los pasos fundamentales para poder manipular el amianto con total seguridad, de modo que garantiza que las fibras de amianto no se desprendan, y eviten contaminar y ser inhaladas a través de los púlmones.
A continuación te resolvemos las dudas sobre la encapsulación.
¿Qué es encapsular la uralita?
El significado de encapsular amianto o uralita, consiste en el proceso de aplicar una capa protectora llamada encapsulante, sobre un material que contenga amianto (MCA), de modo que contiene las fibras de asbestos al material, impidiendo que este se desprenda.
Los materiales que pueden encapsularse suelen ser bajantes, depósitos o tejados de uralita.
¿Por qué es importante encapsular el amianto?
La encapsulación del amianto o uralita es esencial para reducir y evitar riesgos relacionados con la salud.
El líquido encapsulante sirve como adhesivo y como capa protectora, de modo que impide la liberación de las partículas de asbestos en el aire, evitando enfermedades graves como cáncer de pulmón, mesotelioma o asbestosis.
Al utilizar un liquido encapsulante de amianto, ayuda a proteger el material para que no se descomponga o degrade debido al desgaste con el paso del tiempo, o a la erosión de agentes externos.
En resumidas cuentas, el encapsulado de amianto es importante para asegurar la salud tanto de los trabajadores que manipulen el material, como de las personas que se encuentren cerca de este.
También está la opción de utilizar pintura para encapsular la uralita.
¿Cómo encapsular amianto?
- Lo primero que tienes que hacer es comprar productos para encapsular amianto, no cualquiera vale, tiene que ser uno especificamente para ello.
- Se limpia el elemento con un chorro de agua a presión para quitar la suciedad y se aplica una capa fijadora.
- Se retira el material, siempre evitando dañar el propio fibrocemento con amianto o la placa de uralita.
- Se aplica un encapsulado de amianto estando en el suelo, se envasa y se etiqueta.
- Se desplaza el material hasta un vehículo que lo lleve hasta el vertedero o punto limpio correspondiente.
Este procedimiento puede variar levemente según las circunstancias, métodos de trabajo y material a retirar.
¿Quién puede encapsular el amianto?
Los mismos profesionales o empresas que están especializadas, homologadas y formadas para la retirada, gestión y manipulación del amianto.
Es decir, aquellas que estén inscritas en el RERA y tengan un plan de trabajo aprobado.
Quizás te interese saber cuánto cuesta encapsular la uralita.
¿Se puede encapsular cuando la uralita está rota?
Es cuando más importante es encapsularlo, principalmente porque cuando la uralita está dañada, fractuda o ya ha pasado un largo periodo de tiempo, estas desprenden las pequeñas fibras de amianto que son peligrosas para la salud.
Actualmente, casi todo el amianto y uralita que se encuentra en España ya ha cumplido lo que llamaríamos su vida útil, que es de 30 años después de su fabricación, no instalación, el cual demuestra que casi todos los elementos que contienen este material ya están en estado de descomposición.
¿Es legal encapsular la uralita con amianto?
Sí. Es completamente legal encapsular el amianto sin tener que retirarlo, de hecho, en muchos casos es más recomendable debido a que alarga su vida útil, así como la protege de vibraciones y daños que hagan que se desprendan las fibras de amianto.
Según la guía técnica para la evaluación y prevención de riesgos con amianto, se cita textualmente:
«Para evitar la liberación de fibras al ambiente se vienen aplicando productos químicos sobre el MCA mediante, por ejemplo, proyección a baja presión y/o inyección de un material elastómero en forma líquida, de manera que se crea una membrana o recubrimiento sobre la superficie (estabilización por cobertura o sellado) o bien penetrando y ligando los componentes del material (estabilización penetrante o encapsulado). Esta operación, que se realiza para asegurar la durabilidad de un MCA en buen estado y reducir la posibilidad de liberar fibras, no aporta resistencia mecánica al material por lo que está desaconsejada cuando este pueda alterarse por recibir golpes.»
En muchos casos, es más económico que retirarlo, pero hay que destacar que esto no te alude la obligación de retirarlo en un futuro.